Cuentan
los adultos que Geedi era uno de los hombres mas fuertes en la ciudad y el
tenía la mejor ganadería. Su popularidad
era muy grande, además, él era inteligente y muy estricto con la justicia.
Escuchaba
y respetaba a todas las personas que vivían en su reino. Por eso a las personas
les gustaba su sistema de justicio y responsabilidad y a cambio, la comunidad
le regalaban cosas.
Con
esos regalos u ofrendas ayudaban
aumentar su propia ganadería especialmente los camellos.
Por
otro lado, él tenía cuatro hijos que le ayudaban ordeñar y proteger los
camellos. Después de mucho tiempo, la habilidad de Geedi disminuía y su
posición en la comunidad empezaba a olvidarse. Un día, el enfermó. El pedía a
cada uno de sus hijos; tomar un palo y romperlo.
Primero, cada hijo podía romper un palo fácilmente. Además, pedía tener otros palos y atarlos. Después, intentaban romperlos y no podía. Entonces el les decía a sus hijos que se estaba muriendo y les enseño como lección que si siempre están juntos nadie podía separarlos ni tampoco tomar la posición del padre.
Primero, cada hijo podía romper un palo fácilmente. Además, pedía tener otros palos y atarlos. Después, intentaban romperlos y no podía. Entonces el les decía a sus hijos que se estaba muriendo y les enseño como lección que si siempre están juntos nadie podía separarlos ni tampoco tomar la posición del padre.
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